Blefaritis
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¿Qué es la blefaritis?
La blefaritis o inflamación de los párpados es una patología inflamatoria frecuente, localizada en el margen palpebral. Es una de las mayores causas de consulta en nuestra clínica oftalmológica en Barcelona y alteración secundaría en la superficie ocular.
En la mayoría de ocasiones, la blefaritis se presenta por un exceso de bacterias en los párpados, en la base de las pestañas. También se puede desarrollar blefaritis si las glándulas sebáceas de los párpados se obstruyen o irritan.
Las formas agudas de la blefaritis se presentan de forma localizada y autolimitada con una afectación de una o mas glándulas de meibomio u otro tipo de glándulas del párpado. Ambos se presentan de modo recurrente en el contexto de las blefaritis crónica.
En su forma crónica (blefaritis propiamente dicha) puede ser:
- Blefaritis anterior: Localizada la inflamación en la raíz de las pestañas, que suele ser estafilocócica.
- Blefaritis posterior: Caracterizada por la inflamación crónica y las disfunciones de las glándulas de meibomio (meibomitis) asociada, muy frecuentement,e a enfermedades dermatológicas de la piel, como la rosácea y la dermatitis seborréica o mixta.
En los pacientes con blefaritis posterior es frecuente la formación de chalazión u orzuelo (inflamación del párpado por obstrucción de la glándula), que puede ser múltiple y recurrente.
La blefaritis puede ser molesta, pero no es contagiosa y, por lo general, no causa ningún daño permanente en los ojos. El principal tratamiento para la blefaritis consiste en limpiar los párpados con regularidad y mantenerlos sin costras. Muchos pacientes la padecen durante meses e incluso años antes de acudir al oftalmólogo y ser diagnosticados.
La blefaritis generalmente no desaparece por completo, pero puede tomar medidas para controlar sus síntomas.
Las formas agudas de la blefaritis se presentan de forma localizada y autolimitada, con una afectación de una o mas glándulas de meibomio u otro tipo de glándulas del párpado (orzuelo, chalazión). Ambas se presentan de modo recurrente en el contexto de la blefaritis crónica.
Causas de la blefaritis
Hay diversas causas que pueden provocar la blefaritis.
- Afecciones cutáneas como la psoriasis, la rosácea, la dermatitis seborreica, enfermedad inflamatoria intestinal…
- También se puede producir por el uso de lentes de contacto o el uso prolongado de pantallas, debido a la disminución del parpadeo.
- Además, algunos medicamentos como antidepresivos, los antipsicóticos y las píldoras anticonceptivas se han asociado a la aparición de blefaritis.
Blefaritis por estrés:
El estrés generado porque vivimos en un mundo rápido, que no nos permite desconectar y relajarnos, en el que los nervios, la ansiedad y el malestar se apoderan de nosotros genera algunas afecciones secundarias que pueden tener mayores consecuencias sino se controlan.
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- Coroiditis serosa central. Se filtra líquido debajo de la mácula, que es la zona de la retina con la que alcanzamos nuestra máxima visión, y el paciente ve a una macha fija central que disminuye su visión en un ojo, o en los dos.
- Fatiga ocular. El uso intensivo de pantallas digitales (ordenador, móvil tableta) favorece la aparición de molestias oculares asociadas a la fatiga ocular como picor, escozor, sensación de arenilla, visión borrosa o dificultad en el enfoque, entre otras. se engloban dentro de la fatiga ocular.
- Blefaritis por estrés. Al igual que la fatiga ocular, se asocia con la sequedad ocular y puede agravarse con el uso continuado de pantallas electrónicas u otras complicaciones como: patologías de la piel (como el acné rosácea o la dermatitis seborreica), las infecciones bacterianas, los parásitos o la disfunción de las glándulas de meibomio.
- Otros síntomas oculares del estrés son los tics nerviosos en los ojos (blefaroespasmos), la visión borrosa, la visión en túnel, los destellos de luces y fatiga ocular.
El estrés puede afectar a nuestra salud y bienestar general, reduciendo la eficacia de la respuesta del sistema inmunitario del cuerpo y haciendo más probable que el sistema se desequilibre para desencadenar o agravar afecciones cutáneas como la rosácea y la dermatitis seborreica, las infecciones bacterianas o la disfunción de las glándulas de meibomio que pueden desencadenar o agravar la blefaritis.
El estrés también está relacionado con la sequedad ocular, que puede ser causa de una blefaritis. La enfermedad del ojo seco y la blefaritis son dos patologías oculares que pueden presentarse juntas, pero no son iguales, por lo que el oftalmólogo deberá diferenciar ambas antes de aplicar un correcto tratamiento.
Los principales síntomas de la blefaritis por estrés son:
- Hinchazón en la zona de los párpados.
- Escozor y picor de ojos.
- Sensación de cuerpo extraño o arenilla.
- Enrojecimiento de la zona.
- Visión borrosa.
En los casos más graves, el acúmulo de bacterias en borde del párpado hace que la inflamación palpebral esté acompañada por un enrojecimiento importante de la zona, la aparición de escamas en la base de las pestañas, la pérdida parcial o total de las pestañas, legañas y lagrimeo. Cuando mayor sea la gravedad de la afección, mayores serán los síntomas.
Complicaciones de la blefaritis
La blefaritis puede causar algunos problemas más graves como:
- Visión borrosa
- Pérdida de pestañas
- Pestañas que crecen en la dirección incorrecta
- Hinchazón de otras partes del ojo, como la córnea
- Orzuelos
- Chalazión
- Síndrome del ojo seco
- Ojo rojo crónico
Tratamientos de la blefaritis:
Como hemos dicho anteriormente, la blefaritis puede ser molesta, pero no es contagiosa y, por lo general, no causa ningún daño permanente en los ojos.
El tratamiento de la blefaritis depende de la causa que la origina, y siempre debe prescribirlo un oftalmólogo. No obstante, las recomendaciones generales para aliviar sus síntomas se basan en aplicar calor y limpiar los párpados con productos específicos.
La blefaritis, por lo general, no desaparece totalmente, pero puede tomar algunas medidas para controlar sus síntomas.
- Una buena higiene palpebral.
- Uso de antibióticos tópicos en caso de infección por estafilococos
- Fármacos antiinflamatorios
- Luz pulsátil regulada (IRPL)para casos de blefaritis posterior que no responden al tratamiento convencional o para pacientes que no pueden o no están dispuestos a utilizar gotas y pomadas con frecuencia, o durante períodos tan prolongados de tiempo como a veces es necesario para tratar su blefaritis.
- Tratamiento de la posible hipermetropía latente o manifiesta. ( Ver Tratamiento con luz intensa pulsátil IPL – Thermaeye)
- Tanto en la blefaritis anterior como en la posterior, será necesaria una suplementación con lágrimas hasta que haya una mejora en la calidad de las lágrimas del paciente.
- En casos recurrentes de blefaritis anterior se recomienda una microexfoliación palpebral o limpieza profunda de los márgenes del párpado para despegar o exfoliar la caspa, la piel muerta y los desechos en la base de las pestañas.
Su oculista puede detectar la blefaritis mediante un examen físico de los ojos. El médico revisará de cerca sus ojos, párpados y pestañas mediante una una luz brillante o una lupa especial.
Tratamiento de la blefaritis con luz pulsada
La blefaritis posterior está causada por una disfunción de glándulas de Meibomio que comporta la alteración de sus secreciones (sebo meibomiano). que tienen un punto de fusión más elevado que en los pacientes con secreciones normales, lo que dificulta su expulsión a exterior.
El resultado final es que se altera la capa lipídica de la película lagrimal y aumenta la evaporación de la misma, dando lugar a un ojo seco evaporativo (el tipo de ojo seco más frecuente, mas del 80% de casos de ojo seco). Esta película lagrimal más aceitosa y espumosa puede acumularse en los bordes libres palpebrales o en los cantos internos del ojo.
En nuestra clínica oftalmológica en Barcelona disponemos de un novedoso sistema de tratamiento con luz pulsada y luz continua, el Thermaeye para tratar las disfunciones de glándulas de Meibomio y el ojo seco evaporativo secundario a dicha patología.
El tratamiento con luz pulsada de la blefaritis o blefaritis crónica se realiza con una sesión al mes durante 3 meses y luego es conveniente acudir al oftalmólogo repetirlo una o dos veces al año, a modo de recuerdo.
Cómo limpiarse los párpados correctamente si tiene blefaritis
La correcta higiene de los párpados es muy importante para eliminar los síntomas de la blefaritis y posibles problemas mayores asociadas a ella. Para realizar una correcta higiene de sus párpados siga los siguientes pasos:
- Lávese a fondo las manos con agua y jabón.
- Mezcle un poco agua tibia con un limpiador suave, como un champú para bebés.
- Sumerja un paño limpio y suave o una gasa algodón en la mezcla de agua tibia y limpiador.
- Presione el paño contra el ojo cerrado durante unos minutos para aflojar las costras y ayuda a evitar que se tapen las glándulas sebáceas.
- Frote suavemente el paño o el algodón de adelante y hacia atrás, concentrándose en el área donde se juntan las pestañas con los párpados.
- Enjuáguese bien el ojo con agua limpia.
- Repita estos pasos en el otro ojo con un paño o gasa de algodón nuevo.
Si existe inflamación con legañas se ha de tratar de lavar el ojo con suero fisiológico, pero con este abierto completamente. Se ha de echar cantidad suficiente para poder eliminar todos los restos de legañas del mismo, y para que haga efecto de arrastre.
Es un tratamiento muy cómodo e indoloro, pero el mayor beneficio de tratar la blefaritis con luz pulsada es que consigue, en la mayoría de casos, una mejoría en el funcionamiento de las glándulas de Meibomio y de la calidad de la lágrima a partir de la primera sesión y se mejora la lubricación de la superficie ocular al disminuir la evaporación de la película lagrimal y la calidad de vida del paciente.
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Preguntas frecuentes
Los síntomas de blefaritis anterior suelen ser:
- Sensación de cuerpo extraño.
- Arenilla.
- Ardor ocular.
- Picor en el borde libre de los parpados.
- Secreción, sobre todo por las mañanas con aspecto de escarcha en las pestañas.
- Con frecuencia genera una inestabilidad asociada de la película lágrimas y por lo tanto una enfermedad de ojo seco.
- Todo lo anterior, agravado durante el uso de la calefacción, aire acondicionado, ambientes contaminados y las tareas que requieren visión prolongada de cerca.
Los síntomas de blefaritis posterior son muy parecidos a los de la blefaritis anterior y además:
- Alteración de la secreción de las glándulas de Meibomio.
- Presencia de restos grasos en los orificios de salida de las glándulas de Meibomio.
- Hiperemia (enrojecimiento) y telangiectasias (arañas vasculares) en el borde palpebral.
- Escamas y costras en las pestañas.
- Hipertrofia papilar, queratitis punteada, infiltrado marginal, neovasos periféricos, leucomas.
Signos de la blefaritis
- Escamas y costras en las pestañas.
- Hiperemia borde del parpado. Aspecto de las glándulas de meibomio viscoso, turbio, denso y con una constitución parecida a la pasta de dientes (blefaritis crónica).
- Hipertrofia papilar, queratitis punteada, infiltrado marginal, neovasos periféricos, leucomas.
Las personas más propensas a padecer blefaritis en los ojos son aquellas que tienen:
- Caspa en el cuero cabelludo o la cara
- Rosácea
- Piel grasa
- Alergias que afectan a sus pestañas
El tiempo de curación de la blefaritis depende mucho del tipo de blefaritis, la edad y el estado de salud general del paciente. La mayoría de los casos de blefaritis mejoran con tratamiento y una buena higiene de los párpados, pero pueden pasar varias semanas o incluso meses antes de que los síntomas desaparezcan por completo.
Si los síntomas persisten o empeoran, debes consultar a tu oftalmólogo para obtener un tratamiento adecuado.
Hay diversas causas que pueden provocar la blefaritis. Pueden ser por ejemplo las afecciones cutáneas como la psoriasis, la rosácea, la dermatitis seborreica, enfermedad inflamatoria intestinal… También se puede producir por el uso de lentes de contacto o el uso prolongado de pantallas, debido a la disminución del parpadeo.
Además, algunos medicamentos como antidepresivos, los antipsicóticos y las píldoras anticonceptivas se han asociado a la aparición de blefaritis.
Las principales causas de la blefaritis son:
- Funcionamiento disfuncional de las glándulas palpebrales.
- Exceso de grasas en el borde palpebral.
- Dermatitis seborreica.
- Rosácea o psoriasis.
- Ciertos parásitos que se desarrollan en el borde palpebral.
- El estrés puede degenerar en blefaritis u otras dolencias por una bajada en nuestra capacidad inmulógica
- El maquillaje puede favorecer la aparición de blefaritis por entrada de bacterias. Utiliza maquillajes con Ph Neutro, desmaquíllate bien y no alargues la vida de tus maquillajes de ojos.
La blefaritis puede estar causada por una amplia variedad de factores, entre los que destacan:
- Infecciones bacterianas por estafilococo y el estreptococo que pueden causar inflamación en los bordes de las pestañas y los párpados.
- Infecciones virales como la conjuntivitis viral también pueden causar blefaritis.
- Alergias a alimentos, medicamentos, maquillajes, polvo,.. pueden provocar la inflamación de los bordes de las pestañas y los párpados.
- Problemas autoinmunes por enfermedad o estrés.
Los principales remedios para el tratamiento de la blefaritis dependen del tipo y la gravedad de la infección:
- Higiene palpebral.
- Antibióticos tópicos.
- Antibióticos sistémicos.
- Fármacos antiinflamatorios.
- Luz pulsátil intensa.
- Tratamiento de la posible hipermetropía latente o manifiesta.